martes, 7 de agosto de 2012

La Importancia de los Animales en la Vida del Ser Humano




La Ética y Los Animales 

Cuando hablamos de la relación entre el hombre y el animal, la conjunción "y" 
puede expresar diferentes tipos de relaciones. De un lado, puede significar simplemente que en la tierra viven hombres y animales, que de hecho hombres y 
animales, es decir, especies diferentes de animales, de las cuales una es la especie humana, existen en el mismo espacio. De otro lado, el "y" también puede ser 
pensado en un sentido más restringido, a saber, que los animales y nosotros convivimos. Esto puede verse de dos formas, o que los animales domésticos viven en 
la sociedad humana como animales útiles, o bien que algunos hombres conviven 
con determinados animales. 
La presencia de los hombres y los animales en la naturaleza y la vida de los animales domésticos en la sociedad humana son hechos que no dicen nada sobre cómo ha de entenderse la relación hombre-animal o cuándo es ética mente apropiada. Esta pregunta es el tema que aquí deseo tratar . Antes de referirme a ella y para preparar el tema, haré una división y una explicación más exacta de las relaciones tácticas  y daré unas indicaciones generales sobre la ética.







1. Las principales formas de la relación animal-hombre 

Yo diferencio entre dos formas fundamentales:
 a) los animales en la comunidad humana 
 b) la relación del hombre y el animal en la naturaleza. 
Comencemos por  la primera de ellas:

 Los animales en la sociedad:

 Animales útiles. Como animales útiles son considerados especialmente aquellos animales, que sirven para la obtención de alimentos, como por ejemplo los 
cerdos, los bovinos, las cabras, las gallinas, etc. Nosotros hemos sacado a los 
animales útiles de su contexto natural de un modo tal, que ellos ya no pueden 
cuidar de sí mismos. La relación aquí parece ser la siguiente: Utilizamos a los 
animales; a cambio de esto, sin embargo, aseguramos su subsistencia. Pero esto 
no origina ninguna relación entre los animales particulares y los hombres. En 
otras formas de utilización existen en cambio fenómenos de transición, que en 
cierto modo ya pertenecen al ámbito de las relaciones recíprocas, de la cooperación, como por ejemplo en el caso de los animales de tiro y los de montura. 
 Compañeros. El primer animal que se asoció con el hombre e hizo posible la 
generalización de la idea del uso de animales fue probablemente el lobo o perro.

El rasgo característico aquí, es que con tales animales es 
posible, en gran medida, una comunicación, ya que el hombre se convierte para
ellos en un posible compañero social. 

La pregunta ética en general 

Describir el desarrollo y estado de estas relaciones podría hacerse más detalladamente; no obstante, me interesa más la pregunta, cómo deberíamos entendernos y comportarnos en tanto participantes de estas relaciones. 

Primero, hay que observar que esta pregunta sólo concierne a los miembros de la especie humana, si bien en parte se trata de relaciones recíprocas. Pues los miembros de la especie humana son probablemente los únicos animales que pueden reflexionar y actuar moralmente. Que el otro partido no se encuentre en la situación de poder participar de la moralidad, traerá consigo consecuencias para algunos ámbitos. Además, debido a la diferencia de estos ámbitos de acción, se plantea desde un principio la pregunta, si es posible una determinación uniforme del trato moralmente correcto con los animales.

Los animales en la sociedad humana Animales útiles

Comencemos con el núcleo de la moral común del respeto universal. Con relación a los animales, no es posible este respeto en todos los aspectos en los que lo exigimos con relación a los hombres; sin embargo, va más allá del hecho de que los animales pueden sentir dolor y por lo tanto no debemos producírselo. Los animales no sólo pueden sentir dolor, sino también miedo, estrés, etc. Además no son simplemente pasivos, sino que viven su vida, se mueven, actúan y tienen un comportamiento social. En consecuencia, pueden también sufrir cuando se les encierra, cuando se les priva del contacto con sus compañeros de especie, en general, cuando se les impide aquello que se denomina una vida adecuada para su especie.


El hombre y el animal en la naturaleza 

Caza y utilización. Aún en la actualidad los hombres capturan, cazan, etc. animales salvajes. Esto también puede ser visto como una forma de utilización, que sin embargo, ya no tiene ninguna condición especial, sino que simplemente está sujeta a la exigencia moral del respeto a todos los seres capaces de sufrimiento. 
De acuerdo con las reflexiones generales sobre la moral, la utilización de animales salvajes no tiene moralmente ningún reparo, siempre y cuando no se les infrinja por medio de ella ningún dolor, sufrimiento, angustia, etc. Pero tal sufrimiento se dará en la mayoría de los casos. Si suponemos que en algunos casos es evitable, entonces queda la pregunta, hasta ahora no discutida, si el dar muerte a los animales es moralmente aceptable, en los casos en que no se presenta ningún sufrimiento.



Resumen

Se ha mostrado que las relaciones entre animales y hombres poseen una estructura muy variada y que por lo tanto, en el trato con los animales desempeñan una función diferentes concepciones morales fundamentales y principios de acción. La conceptualización muy difundida actualmente, que ve al animal como un semejante (añadiendo eventual mente a ello, que somos responsables de él), resulta ser más bien vaga; ella encaja de mejor forma justamente allí, donde chocamos con los límites de la moralidad y donde una posición moral sólo puede ser expresada en los afectos del lamentarse por el hecho de que no podemos tener consideración en cualquier circunstancia.